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Hola a todas a todos! Les cuento que yo soy una persona super organizada, por lo que para mi tener un plan o un cronograma de estudio es verdaderamente importante porque nos ayudar a organizar nuestro tiempo, actividades y lo que queremos aprender, especialmente si estamos aprendiendo en casa.
En
primer lugar, quiero decirles que no les puedo dar un plan o un cronograma ya
hecho y esto es porque todas y todos somos diferentes: aprendemos idiomas
diferentes por diversas razones, y principalmente, hacemos cosas distintas cada
día, algunas personas trabajan 8 horas, otras 12, otras no tienen hijos, otras
tienen varios, así que cada uno de nosotros es un mundo.
Dicho
esto, vamos a ver los aspectos que debemos tomar en cuenta para hacer nuestro
plan o cronograma, así que es hora de sacar papel y lápiz:
#1
¿Cuál es nuestra motivación? Este tema lo vimos en el capítulo 1, así que no
voy a profundizar mucho en esto. Lo importante de recordar es que, dependiendo
de por qué queremos aprender, pues eso va a influir en cuánto tiempo deberíamos
de dedicar al estudio y hasta cuál nivel deberíamos de llegar. Por ejemplo, si
queremos aprender el idioma más que todo por hobby, tal vez para viajar o para
ver películas sin subtítulos, entonces el tiempo que vamos a necesitar para
estudiar probablemente sea menor en comparación si queremos el idioma para
sacar un posgrado, irnos a vivir a otro país o incluso para dar conferencias
donde se usa un lenguaje científico. Claramente, va a haber una diferencia.
#2
Establecer metas claras y alcanzables, esto también lo conversamos en el
episodio 1. Cuando hablamos de metas, me refiero tanto a la meta final, por ejemplo,
sacar mi posgrado en determinado país, como a las metas pequeñas o esos pasos
que nos van acercando al objetivo. ¿Por qué esto es importante? Bueno, si lo
que yo quiero es sacar mi posgrado, entonces probablemente un nivel A1 o A2 no
sea suficiente, y entonces mi meta debería ser llegar como mínimo al nivel B1. Alcanzar
el B1 en 3 meses es prácticamente imposible, así que, por ejemplo, si quiero
alcanzarlo en un año entonces sé que debo dedicar más tiempo a estudiar semanalmente
y comprometerme conmigo misma y mi propósito. Es también importante ponernos
metas a corto plazo, que puede ser en meses o incluso semanas, por ejemplo,
cumplir con determinadas horas de estudio en esta semana o para fin de mes ser
capaz de escribir un texto describiéndome a mí, a mi familia a mi perro. En
este sentido, una excelente opción es establecernos fechas para un examen, el
cual puede ser un examen oficial así como un autoexamen, donde evaluaremos
nuestra capacidad de hacer, decir o comprender algo.
#3
Tomar en cuenta la forma en que se nos hace más fácil aprender. Si no están
seguros de esto, les recomiendo escuchar el episodio 2, donde hablamos de los
diferentes canales de aprendizaje y cómo sacarle provecho a cada uno. Acá es
importante también mencionar que no es buena idea usar demasiadas herramientas de
estudio al mismo tiempo o día, por ejemplo, mezclar 3 apps, dos páginas web, un
libro, un podcast y 2 canales de YouTube, porque al final se nos va a hacer muy
difícil medir nuestro progreso. En mi caso, les cuento que yo solo uso 2
herramientas o recursos por día, por ejemplo, un día utilizo una app y escucho
un podcast, el otro día otra app y un video, porque así se hace más fácil
asimilar y organizar lo aprendido.
#4
Determinar cuánto tiempo puedo dedicar a estudiar, y esta es una respuesta 100%
individual, porque solo nosotros mismos sabemos de cuánto tiempo disponemos
para estudiar el idioma. Si estamos aprendiendo por diversión, porque nos
gusta, por viajar, etc, yo les recomiendo que cada sesión sea de unos 30
minutos por día la mayor cantidad de días que puedan semanalmente, porque teniendo
periodos cortos de estudio es más fácil concentrarse y luego va a ser más fácil
también recordar la información. Por otra parte, si están aprendiendo el idioma
por un tema profesional, entonces las sesiones deberían de ser un poco más largas;
por ejemplo, las lecciones de una hora serían una buena opción. Les recuerdo
que es también necesario dejar un día para repasar y practicar lo que
aprendimos durante la semana, así como otro día para descansar y dejar que el
nuevo aprendizaje se interiorice y asimile.
#5
Escribir nuestro plan. No importa si llevamos una agenda, un planificador, lo
escribimos en el calendario del correo electrónico o en una hoja de papel
pegada en una puerta, es realmente importante poder visualizar el tiempo que
vamos a dedicar a estudiar y cómo lo vamos a hacer. De hecho, mi agenda pasa
tan llena con todos mis pendientes del trabajo, que mi plan de estudio está
escrito en un sticky note y aun así ha sido 100% efectivo. Si tenemos mala
memoria o todo se nos olvida, podemos programar alarmas o recordatorios en
nuestros teléfonos o asistentes de voz. Al escribir el plan es también
necesario tomar en cuenta que a través de la semana debemos haber practicado
todas las habilidades: escribir, leer, escuchar y hablar, por lo tanto, debemos
distribuirlas entre la cantidad de sesiones que vamos a tener.
#6
Ser flexibles. Ningún plan de estudio está escrito en piedra, así que, si algo
no funciona o si nuestra dinámica diaria ha cambiado, pues adaptamos el plan a
las nuevas circunstancias y no hay problema, la idea es tener un plan que
funcione, no uno que nos cause estrés o frustración porque no lo podemos
cumplir. Por ejemplo, yo he cambiado mi plan de estudio montones de veces,
porque mis horarios de trabajo cambian, así que voy adaptando a las
circunstancias.
Muy
bien, hemos llegado al final del episodio. Espero que con estos tips ya puedan
empezar a crear su plan de aprendizaje. Gracias por acompañarme una vez más,
hasta la otra semana!
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